No es inusual para IMBA recibir un  correo electrónico o una llamada telefónica de pánico con estas lineas : "Ayuda - no podemos entrar más a nuestro sendero favorito, porque nos cerraron el acceso ¿Qué hago?"

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En primer lugar, asegúrarse de obtener los hechos directamente - no  basarse en rumores. Las preguntas clave incluyen:

  • ¿Por qué es que  el sendero está cerrado?
  • ¿Quién toma decisiones sobre el cierre?
  • ¿Dónde exactamente es el cierre?                               

                                  

Luego, involúcrese con su club de cilismo de montaña local. Comunmente, algun grupo local ya estará trabajando en el tema. Casi todos los intentos con éxito para mantener abiertos senderos o pistas amenazadas son manejados por grupos y no por los ciclistas o deportistas individuales.

Pregunte a las personas a cargo o que toman decisiones si usted puede proporcionar información. Si es necesario, solicitar un retraso en las decisiones para ganar tiempo.

Ayude a movilizar a su grupo. Organize reuniones, asista a las audiencias, proporcione información, realice trabajo voluntario en los senderos, etc

Obtenga datos de  las empresas con intereses económicos en los senderos locales para respaldar su palabra, incluyendo tiendas de bicicletas, centros turísticos y grupos de turistas, periódicos y otras empresas locales.

Sea respetuoso y desarrolle una reputación responsable. Despotricando no ayudarás a mantener los senderos abiertos. El proceso político requiere de la cooperación, paciencia y tenacidad.

Aprender del proceso para anticipar problemas futuros. Es mucho más eficaz de trabajar con los administradores de tierras y otros grupos de usuarios antes de que una situación llegue a la etapa de crisis.